El emprendimiento consiste básicamente en atreverse a realizar una actividad productiva. Generalmente son negocios que comienzan muy pequeños pero que tienen grandes proyecciones, todo depende del esfuerzo, dedicación y perseverancia de quienes se atreven.
Una pareja de jóvenes que estudió gastronomía y ante la falta de oportunidades laborales, decidió generar su propio emprendimiento y adquirió un carro de comida rápida con el cual se instalan en el centro de la ciudad, su propuesta en las mañanas temprano son sopaipillas y completos.
Jesica Urra y Armin Rivera estudiaron gastronomía internacional y aun cuando sus sueños son mayores, decidieron comenzar por algo, tener un pequeño negocio. La etapa mas difícil fue reunir el capital, para lo cual decidieron irse por dos años a Iquique y lograr reunir el dinero (un millón de pesos cuesta el carro).Debieron sortear varios escollos antes de materializar su emprendimiento, ya que lo “lo mas complicado fue el asunto de los permisos de salud, ya que por el tema de higiene no aceptan cualquier carro”.
Respecto de vender comida rápida en la calle, ellos señalan que el haber estudiado gastronomía le permite tener conocimientos y conciencia respecto de la manipulación de alimentos, atendemos con uniforme y una persona ve el dinero y otra se dedica exclusivamente a la manipulación”.
Reconocen que no es fácil llegar a tener algo propio pero, están decididos a lograrlo.
El carro de comida rápida, cuya confección cumple con todos los requisitos, está hecho de acero inoxidable, cuenta con un estanque de agua de 100 litros y recipiente de recepción, cocinilla a gas, un sistema de refrigeración con hielo-gel, entre otras características.
Hace tres semanas que están trabajando en el centro de San Carlos, por las mañanas se les puede ver en la esquina de “Tricot,” por la tarde en Portales con Independencia.