Tras confesar que cometió delitos al recibir platas en caso Penta.
A principios de año el partido se comprometió a enviar al Tribunal Supremo a los militantes condenados en el caso Penta y posteriormente expulsarlos. Resulta que el primero en caer fue Jovino Novoa, el histórico "coronel" y repentinamente las sanciones se convirtieron en un punto a analizar.
El compromiso fue hecho y llegó el momento de cobrarlo. A inicios de año, cuando la arista política del caso Penta estalló, la Unión Demócrata Independiente se comprometió a expulsar del partido a sus militantes que resultaran condenados en el caso.
11 meses después resultó que fue uno de sus coroneles, el exsenador Jovino Novoa el primer militante en enfrentar una pena judicial. La defensa alcanzó un acuerdo con el Ministerio Público para ir a un juicio abreviado. El Fiscal Nacional, Sabas Chahuán, quien hoy deja el cargo, pidió tres años de reclusión.
El acuerdo fue alcanzado después que el mismo Novoa reconociera los ilícitos de fraude tributario y financiamiento ilegal a la política. La confesión vino también con la suma de tres atenuantes que redujeron su riesgo de caer en prisión. Primera razón para entrar a colaborar con la justicia.
A fin de cuentas, es una condena en todas de la ley y es el momento de conocer si el partido cumplirá con el compromiso, incluso si es en contra de uno de sus fundadores.
Es relativo
Sobre la sanción, el vicepresidente del partido, Edmundo Eluchans, consideró que cada caso debe ser estudiado particularmente, por lo que es vital conocer primero la condena fijada para el 2 de diciembre, antes de que la UDI tome una decisión.
Sobre la sanción, el vicepresidente del partido, Edmundo Eluchans, consideró que cada caso debe ser estudiado particularmente, por lo que es vital conocer primero la condena fijada para el 2 de diciembre, antes de que la UDI tome una decisión.
En conversación con nuestro medio, el exdiputado alegó que "entiendo que lo que se hace en estos casos es que el acusado reconoce los hechos y no necesariamente que estos constituyan delito, por eso quiero ver el fallo, quiero leerlo".
"Cada caso hay que aprobarlo o decidirlo en su mérito. Imagino que no corresponde que respecto que haya una resolución, se aplique a todos. Cada caso tendrá su particularidades", agregó el vicepresidente.
Decisión atrasada
La UDI tiene dos caminos: cumplir o recular. Solo la tienda de calle Suecia tiene la respuesta. Lo que sí dicen desde fuera es que lo más conveniente es que concreten la expulsión de Novoa, por muy tardío que sea, para dar una señal de compromiso con la probidad.
La UDI tiene dos caminos: cumplir o recular. Solo la tienda de calle Suecia tiene la respuesta. Lo que sí dicen desde fuera es que lo más conveniente es que concreten la expulsión de Novoa, por muy tardío que sea, para dar una señal de compromiso con la probidad.
"Que la UDI no cumpliera un compromiso que su Consejo Nacional adoptó sería un total descrédito y quedaría en juicio lo que su directiva podría hacer en la agenda de probidad. La medida fue una de ética y buenas prácticas, pero que la Justicia no les exige", dijo a Cambio21 Álvaro Castañon, director de la Fundación Multitudes y exmiembro de la comisión Engel.
Cumpliendo lo dicho, se "estaría tomando una opción tardía pero plausible en el sentido de que el partido le quitaría el futuro político a una persona condenada, a pesar que el fallo no le quita la posibilidad", agregó.
El analista consideró que el gesto de la UDI podría marcar una pauta sobre los temas de corrupción, aunque dijo que es difícil saber si esto podría restablecer las confianzas entre el partido y el sector al que buscan representar. "Esta es una decisión que los partidos deberían tomar mucho antes", finalizó.