Con el objetivo de analizar alternativas de apoyo para los cereceros de la comuna de Quillón,
el seremi de agricultura, Rodrigo
García, convocó a los representantes regionales de la comisión Nacional
de Riego y Zona de Rezago del Valle del Itata, a presentar los distintos
programas, disponibles en ambas instancias, a los cuales los pequeños
agricultores dedicados a la producción de cerezas podrían acceder.
La primera autoridad del agro regional
precisó que se ha desarrollado un trabajo importante con los
productores, con visitas a terreno, charlas e incentivos productivos.
Respecto a este último punto, destacó que se ha estado implementado la
entrega de este apoyo a los productores. "Ya se entregó una primera
parte y acordamos en que a fines de mayo o a principios de junio, se
abriría el concurso para entregar la segunda parte del incentivo. Esto
es básicamente para apoyar la continuidad del rubro, de los productores
que fueron afectados fuertemente por las inclemencias climáticas" dijo
García.
En la jornada se analizó algunos de los
programas de la Comisión Nacional de Riego (CNR). Claudio Venegas,
profesional de CNR en Biobío, señaló que a nivel nacional hay
disponibles recursos por 4.600 millones de pesos a través de cuatro
concursos. "Aún no tenemos claridad respecto a los montos disponibles en
Biobío, esto dependerá de la cantidad de postulantes al programa de la
pequeña agricultura familiar. Los agricultores, que califican en este
programa, pueden acceder a postular proyectos de riego con un tope de
400 U.F, es decir, un monto promedio a los $10 millones de pesos".
Por su parte, Sergio Valdés, coordinador
regional del programa de gestión Zona de Rezago en el territorio Valle
del Itata, destacó que el apoyo a los cereceros, se podría activar a
partir de 2017. "No habíamos trabajado con la mesa de cereceros, pero
calza perfectamente con el programa de la agricultura familiar
campesina. Lo vamos a ver para la proyección del programa trianual a
partir del próximo año, porque lo que corresponde a 2016 ya está la
cartera de proyectos aprobada. Vamos a estudiar cómo los vamos a apoyar a
través de otros instrumentos de gobierno".
La última temporada frutícola es una de
las más complejas por las que ha tenido que pasar en los últimos años el
rubro cerecero. Las lluvias primaverales a fines de 2015 y las
enfermedades fungosas a las cuales se vieron expuestas las plantaciones,
configuran como "un período para el olvido", como catalogan los propios
productores, a laúltima etapa de cosecha.
Sin embargo, las mermas productivas han
sido equiparadas con el apoyo gubernamental a través de la secretaría
regional de Agricultura. Así lo explicó Mario Alarcón, segundo director
de la agrupación de cereceros de Quillón. "Se está trabajando bien en
conjunto con el gobierno, en este caso con el seremi y sus asesores,
INDAP y Prodesal. Con mesas de trabajo redonda, donde se está viendo
temas tecnológicos, incentivos y fomento".
El dirigente agregó que el trabajo
coordinado con la entidad agrícola "complementa con todo lo que queremos
hacer como cereceros y además se puede replicar a distintas áreas
agropecuarias de la zona. Lo principal es poner énfasis en riego, que es
lo principal, porque sin agua no se puede hacer nada y también entramos
en zona de rezago para poder aplicar toda la nueva normativa que se
puede hacer. La organización cuenta con un número cercano a 90 miembros,
pero cada vez sigue creciendo con otros agricultores que están elevando
la solicitud para ser parte de la organización" señaló Alarcón.