El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Chillán absolvió a Jaime Toro Orellana de la acusación formulada
por el Ministerio Público que lo sindicaba como autor del delito de homicidio simple, ilícito supuestamente perpetrado en diciembre de 2015, aquí en San Carlos.
En fallo unánime el tribunal desestimó la existencia del delito al establecer que en el caso concurren todos los requisitos de la legítima defensa en la muerte de Fernando Rafael Holzapfel Morales.
Fallo que dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que en horas de la madrugada del 20 de diciembre de 2015, Jaime Toro Orellana se dirigió en un taxi hacia el sector de calle Roble, solicitando al taxista que se detenga y lo espere en la vía pública, al regresar, llegó hasta el lugar Fernando Rafael Holzapfel Morales, "comenzando una discusión verbal entre ambos y, posteriormente, un forcejeo, instantes en que Toro Orellana toma el arma corto punzante que tenía en la mano Holzapfel Morales, y le propina tres cortes". Heridas que provocaron el fallecimiento de Holzapfel Morales por un taponamiento cardiaco secundario, según informe del Servicio Médico Legal.
"Los hechos antes descritos no son constitutivos de delito, toda vez que el tribunal después de valorar la prueba rendida en el juicio, de conformidad a lo establecido en la ley ha arribado a la conclusión, más allá de toda duda razonable, que en la especie se han acreditado y en consecuencia concurren todos los requisitos de la causal de justificación invocada por la Defensa, esto es legítima defensa propia", concluye el fallo.