Cuántas impresoras y equipos de computación son dados en baja en los colegios y en las oficinas públicas, solo en San Carlos?
Que los estudiantes más modestos puedan crear sus propias impresas 3D a partir de elementos, en su gran mayoría reciclados, es el objetivo que se planteó Manuel Moisés Merino, sancarlino, estudiante de informática y que antes nos sorprendió al crear un guante biónico que convierte el lenguaje de señas en audio y texto digital.
La nueva creación es una impresora 3D capaz de imprimir, como su nombre lo indica, piezas o figuras en tres dimensiones y está confeccionada con partes de impresoras comunes.
Su creador asegura que es posible que niños de cualquier colegio puedan confeccionar una de estas impresoras 3D y a partir de la primera, confeccionar las piezas para armar las siguientes.
Manuel Moisés, relata su creación: "Estoy estudiando informática, soy el chico que creó el guante para las personas sordas mudas.
Desde hace varios años me dedico a innovar y crear soluciones tecnológicas y desde allí surgió la idea de crear una impresora 3d casera con partes de otras impresoras normales.
Me llevó 2 años junto a mi hermano gemelo terminarla, muchos me dijeron que no se podía hacer por las dificultades de calibración, pero sí resultó.
Tomó esa cantidad de tiempo por la búsqueda de los elementos adecuados para su funcionamiento. Mi idea principal a futuro es crear mini impresoras 3d para los colegios de educación básica y de escasos recursos.
Cada cierto tiempo jóvenes sancarlinos nos muestran con hechos palpables la necesidad de crear un centro tecnológico y de innovación que pueda iniciar sus primeros pasos con nuestra juventud para luego traer el apoyo de las universidades.
Iniciativas como esta, de jóvenes sancarlinos que destacan en tecnología, deporte, ciencias, arte y en distintos frentes, es donde debiera colocarse el foco de la atención y los recursos, lo demás como diría un expresidente…es música.